La Triquinosis (trichinellosis) es una zoonosis (enfermedad transmitida de animales a humanos) parasitaria cosmopolita, producida por el consumo de carne de cerdo o jabalí insuficientemente cocida que contiene quistes larvales microscópicos de Trichinella spiralis (descrita en Chile), un gusano parásito que se aloja en intestino y musculatura de estos animales infectados. Por tanto, es una Enfermedad Transmitida por Alimentos (ETA) y de Notificación Obligatoria (ENO) en nuestro país.
La infección en humanos se caracteriza por producir síndrome febril, dolor de cabeza, hinchazón alrededor de los ojos y dolores musculares intensos. Además, se puede presentar dolor abdominal tipo cólico, náuseas, vómitos, diarrea y malestar general. Un hemograma (examen de sangre) puede evidenciar eosinofilia elevada. En casos graves y dependiendo del número de larvas ingeridas puede comprometer el corazón y diafragma, generando la muerte por un paro respiratorio.
En el contexto de la pandemia, esta enfermedad podría ser confundida inicialmente con algunos síntomas de COVID-19, por lo que la anamnesis es importante para el diagnóstico diferencial. El antecedente de consumo de carne cruda o mal cocida de cerdo y/o sus derivados (longanizas ahumadas, salame, entre otros) orienta al diagnóstico y hace posible su tratamiento.
Los grupos de riesgo son personas de zonas rurales que consumen carne de cerdo o cecinas de elaboración casera o procedencia desconocida. Las principales fuentes de riesgo son los cerdos de traspatio, que circulan libre cerca de basurales, sin alimentación controlada ni inspección veterinaria.
En Chile, la triquinosis es endémica y evoluciona con brotes epidémicos esporádicos, sobre todo en el segundo semestre del año, en que se incrementa el consumo de carne porcina, por ejemplo, en el año nuevo mapuche, fiestas patrias y costumbristas. En años anteriores, se han reportado brotes importantes en la región de La Araucanía, Los Ríos y Los Lagos.
Por esto, es necesario hacer un llamado a los consumidores, a evitar el faenamiento de carne clandestino, conocer la procedencia y certificación de la carne que será consumida en estas fiestas, comer la carne bien cocida, tanto la de cerdo como de vacuno, ya que por esta última también es posible adquirir otras parasitosis.