Con una amplia convocatoria se realizó el conversatorio «Universidad, Escuela y Comunidad: Una mirada desde el reconocimiento de los agentes involucrados en la Formación Situada», dictado por la Dra. Donatila Ferrada el 11 de agosto vía Zoom. La actividad formó parte del inicio de un ciclo organizado por el Programa de Formación para Profesores y Profesoras de Enseñanza Media.
La docente de la Universidad Católica del Maule planteó un debate sobre la pedagogía dialógica, explicando que esta se refiere a donde hay reciprocidad entre todos los integrantes de la comunidad. Dentro de su presentación expuso un video de una escuela multidisciplinaria, enfatizando el modelo de pedagogía dialógica. “Se centra en un trabajo de incorporar a la comunidad para que se sientan parte y puedan valorar la cultura, recuperar tradiciones y aportar de manera directa a la enseñanza de los niños. Así también los apoderados participan intercambiando conocimientos y se realiza una salida a terreno para conocer el lugar del apoderado en cuestión y así vivir la experiencia real y en persona”, explicó.
Para la directora del Centro de Investigación en Educación para la Justicia Social, se requiere crear una esfera de igualdad de trato, que otorgue garantía legal para todas y todos. “Los aportes de cada uno se consideran igual de importantes. Cuando esto no se cumple, afecta a la comprensión del valor del sujeto y cuál es su aporte al grupo al que pertenece, para no sentirse menospreciado”, precisó.
Donatila mencionó que “la esfera del amor está un poco olvidada, ya que las relaciones afectivas están un poco dejadas de lado. Las universidades y las escuelas dejan de lado que son parte de esta comunidad, por lo tanto, el cuestionamiento no es recíproco, dejando responsabilidades y dándole importancia sólo al exitismo de saberes científicos y concretos y no se les da valor a otros tipos de conocimientos”. Según la expositora, esto significa la negación del otro y reflejan también la carencia desde el lado que menciona la crítica.
Reflexiones de los asistentes
La instancia generó un enriquecedor diálogo entre los asistentes. En este marco, Cintia Riquelme, coordinadora académica de un colegio, comentó que existe una brecha importante en el conocimiento que tiene la universidad y la escuela, y que en ese punto falta compartir las experiencias: “Se podría generar más intercambio dialógico para obtener más posibilidades de aprendizaje entre alumnos de colegio y universidad, creo que hay un vacío del que hay que hacerse cargo, y que como profesores debemos tomar esas posibilidades para generar un ambiente distinto de aprendizaje. Aproximarse colegios a universidades y de manera recíproca también”.
Por su parte, Tamara Busquets planteó que le gustó mucho la idea del amor como un reconocimiento. Y, bajo esta idea, precisó: “Existen dos puntos de vista de las clases en modo pandemia, algunos apoderados critican mucho la manera de hacer clases en pandemia y otros que valorizan mucho la labor docente”.
El profesor Javier Bastidas recalcó: “Debemos cuestionarnos el por qué somos profesores y validarnos de aquello para realizar esta integración social y utilizar herramientas tales como conversaciones con apoderados en reuniones para generar esta visión crítica. Y llevarlo a que a través de la educación podemos comprender el mundo más que prepararse para un mundo laboral”.
Balance de la actividad
La coordinadora del Programa de Formación para Profesoras y Profesores de Enseñanza Media, Paulina Larrosa, hizo un positivo balance del conversatorio. «Considero que la actividad logró generar un espacio de diálogo y reflexión en función de temáticas sensibles y relevantes no sólo para la formación docente sino para la comunidad educativa en general y nuestros vínculos de reciprocidad con estos contextos”.
A su vez, la docente agradeció la exposición de la invitada y la cercanía al abordar los temas con los participantes: “Donatila nos compartió desde una manera cercana y sensible, temáticas que movilizan el quehacer educativo y la formación de profesores hacia el reconocimiento de los actores involucrados en el proceso, tanto en las escuelas, con las familias, las/los docentes y las/los niñas(os), como igualmente en el contexto de la formación de profesores, compartiéndonos proyectos educativos que integran a la comunidad y que permiten desde ese reconocimiento promover la justicia social.”
Finalmente, Larrosa valoró la participación de quienes asistieron a este primer conversatorio destacando sus intervenciones durante el encuentro.
El ciclo de conversatorios Educación y Comunidad: Una aproximación desde la Formación Inicial Docente continuará en septiembre con nuevos temas para contribuir al dialogo entre la Universidad y la comunidad.