El proyecto beneficiará a pacientes de alto riesgo de centros de diálisis y Clínica Alemana, así como a los trabajadores de las empresas PACEL S.A. y ASENAV.
Desde su reporte oficial el 31 de diciembre de 2019, el virus SARS-CoV-2 ha infectado a más de 60,8 millones de personas en el mundo. En Chile, el balance total desde inicios de marzo es de 545.662 contagios y 15.235 muertos. En la Región de Los Ríos, se han presentado más de 5.600 casos confirmados, cifra que aún está en alza.
La rápida detección y aislamiento de individuos infectados es uno de los métodos más efectivos para el control de COVID-19. Sin embargo, hasta un 45% de los infectados son asintomáticos o pre-sintomáticos, considerados los principales diseminadores del virus. En la Universidad Austral de Chile, gracias al Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC) del Gobierno Regional de Los Ríos aprobado por el Consejo Regional de Los Ríos, se ha generado un modelo de vigilancia epidemiológica, único en Chile y Latinoamérica, que permite el monitoreo en el tiempo a grupos de personas que componen diferentes escenarios de riesgo, como adultos mayores, personal de salud, pacientes dializados, por una parte, y por otra, personas expuestas debido a sus actividades laborales, permitiendo con ello reactivar la economía de las instituciones.
«VIGIA: Plataforma Gestión Integral para la Vigilancia Activa de COVID-19″
El objetivo del proyecto VIGIA es desarrollar, validar y evaluar un sistema de gestión epidemiológica para COVID-19, mediante este diseño de testeo masivo, pero incluyendo una aplicación móvil, que permita asegurar un proceso de identificación temprana de individuos infectados.
En esta propuesta se realizará un piloto con el modelo de testeo masivo a través del uso de la aplicación móvil en dos escenarios distintos, uno son los centros de diálisis NephroCare y Clínica Alemana y en las empresas PACEL S.A. y ASENAV, dado que gran parte de sus usuarios pertenecen a grupos de riesgo que deben ser monitoreados.
Tal como lo explicó el Director del proyecto, Epidemiólogo y Director del Laboratorio de Ecología de Enfermedades de la UACh, Dr. Claudio Verdugo, se eligió al primer grupo debido a que “las personas en diálisis tienen una tasa de mortalidad por COVID-19 significativamente mayor que la población general. Similarmente, producto de esta epidemia, una serie de procedimientos ambulatorios invasivos de prioridad, tales como endoscopías, colonoscopías y fibrobroncoscopia, se han detenido debido a la potencial transmisión entre usuarios. En este sentido, realizaremos un piloto con usuarios y personal de Clínica Alemana involucrados en este tipo de procedimientos”.
Por otra parte, debido a que la pandemia ha generado una crisis económica mundial, de la cual nuestro país no ha estado libre, la mantención y/o reinserción de los trabajadores en sus funciones es fundamental para la reactivación. Sin embargo, ésta se debe dar en un ambiente de seguridad y detección temprana. Según el MINSAL-Chile, la mayor cantidad de casos confirmados se acumula en personas entre 25 y 39 años, afectando en gran medida a la fuerza laboral. “Es por esto que este proyecto busca ampliar esta plataforma de vigilancia a trabajadores de la Región de los Ríos, utilizando dos empresas íconos de la Región, como PACEL S.A. y ASENAV. De esta manera, esperamos un impacto sobre el bienestar y salud de las personas, así como en facilitar la mantención y/o reinserción de las personas a su trabajo en toda la Región de Los Ríos pudiendo esta estrategia ser replicada a nivel nacional”, explicó el Dr. Verdugo.
La aplicación
A través de un sistema integral de vigilancia activa mediante el uso de una plataforma móvil de fácil uso para el usuario acoplado a un sistema de detección viral masivo y costo-eficiente, se podrá dar una respuesta rápida a la contingencia provocada por COVID-19, en sectores de salud y económicos de la Región, siendo además una plataforma potencialmente aplicable a otras patologías y futuras enfermedades.
VIGIA consta del acoplamiento de un sistema de detección viral masivo y costo-eficiente a una plataforma móvil (aplicación) de fácil uso para el usuario/paciente. Será probado por usuarios de las 4 instituciones colaboradoras. Cada usuario descargará la aplicación VIGIAmovil a un aparato celular, y registrará con sus datos personales, autorizando (o no) la toma/análisis de muestra, asegurando confidencialidad. Cada usuario recibirá un kit de auto-muestra para saliva con un código QR, un envase secundario para prevenir derrames y un instructivo didáctico. El código QR será escaneado por el usuario usando la aplicación. El sistema notificará en la aplicación para que la muestra sea retirada y trasladada al laboratorio por personal contratado para dichos efectos, semejante a sistema delivery. Al ser recepcionada en el laboratorio la muestra será escaneada e ingresada al procesamiento. Las muestras de 10 individuos serán procesadas en una sola reacción (pool). Si en este pool la detección de SARS-CoV2 resulta negativa se le notificará a los 10 individuos involucrados su resultado a través de un mensaje a la aplicación y correo electrónico. Si el pool resulta positivo, se procesarán las 10 muestras de manera individual para definir cuál o cuáles de los individuos es positivo, y se le notificará mediante la aplicación y correo electrónico, tanto al usuario como a la autoridad sanitaria para que tomen las medidas correspondientes. La vigilancia opera con un testeo diario en pacientes nuevos (ej. Clínica Alemana) o un monitoreo semanal de pacientes/funcionarios (ej. Centro de Diálisis) y empleados de acuerdo a turnos de trabajo (ej. ASENAV, PACEL).
Impresiones
La encargada del Departamento de Aseguramiento de la Calidad de la empresa PACEL S.A., Paula Gajardo, quien trabaja en conjunto con el prevencionista de emergencia por el COVID-19, contó que en marzo cuando comenzó la pandemia implementaron un plan de emergencia para poder seguir con la producción. “Somos 150 personas, y en marzo reestructuramos la organización, con aforo reducido en todas las áreas. Es decir, trabajamos por turnos cada uno con la mitad del personal. Fue bastante exigente, pero era la única manera de mantener la producción y evitar los contagios”, dijo, agregando además que en la empresa trabajan bastantes personas mayores.
«Decidimos ser parte de este proyecto, ya que era para nosotros una tremenda oportunidad de reactivar la empresa de manera normal con seguridad y así no detener la producción. Realmente desde la gerencia era un orgullo trabajar con la Universidad y la verdad el equipo ha sido muy claro, la comunicación es muy fluida. Estamos muy contentos de ser parte de esta iniciativa”, indicó Paula Gajardo.
Por otra parte, ASENAV desde el inicio del anuncio de la pandemia comenzó a tomar acciones de prevención, teniendo como política el estar un escalón más estricto de lo que indicaba la Autoridad Sanitaria.
Tal como lo contó el gerente general de la empresa, don Heinz Pearce, se tomaron diversas acciones para modificar el normal régimen de trabajo, creando varios turnos de llegada al astillero de modo evitar las aglomeraciones tanto al ingreso, vestidores, lugares de trabajo, como también reducir el número de personas en los comedores a la hora de colación y en los buses en cada uno de los trayectos diarios. Lo anterior tanto en el ingreso como en la salida de la jornada laboral.
Luego, además de todas las medidas físicas y de conductas preventivas tomadas ASENAV, identificó que el Programa de Vigilancia Activa Epidemiológica, liderado por la UACh, “complementa en forma virtuosa la detección temprana de contagio”.
Para el gerente Heinz Pearce, el beneficio primero de este programa es “proteger la salud de nuestros trabajadores y la de sus familias, lo que ayuda a que puedan mantener su fuente laboral y de sustento de sus familias, una gran tranquilidad en estos tiempos de gran incertidumbre laboral y dificultades económicas en que atraviesa nuestro país”, agregando que “el mantener la empresa en marcha permite dar cumplimiento a nuestros compromisos contractuales de construcción de nuevas naves, pudiendo con ello cumplir todas las obligaciones financieras y mantener el empleo de nuestra gente”.
“Tenemos conciencia que nuestra empresa posee una importancia relevante para la economía de la Región y en especial para la ciudad de Valdivia, por lo que debemos mantenerla activa en todo momento, sorteando de la mejor forma este imprevisto que nos ha presentado la pandemia”.
Tal como destacó el Sr. Pearce, el programa de la UACh refuerza lo ya implementado en cuanto a prevención sanitaria establecida para todo el personal y que debiera replicarse: “este Programa es una acción que se debiera materializar al menos en todas las organizaciones que poseen un número importante de personas o que su actividad sea vital en beneficio del servicio público”, finalizó.