Más de 150 ferias costumbristas en diferentes estados de desarrollo y alrededor de tres mil locatarios existen en la Región de Los Ríos. Así lo determinó el equipo de profesionales que ejecutó el proyecto FIC que caracterizó la realidad de las ferias costumbristas regionales entre los años 2016 y 2017.
En la actualidad, y como una manera de continuar aportando en el desarrollo de estas ferias, el mismo equipo de investigadores, conformado por Carla Rosenfeld y Mónica Sáez de la Facultad de Ciencias Veterinarias, Guillermo Nova y Laura Pacheco del Instituto de Turismo y liderado por el médico veterinario de la Universidad Austral de Chile, Dr. Rafael Tamayo, ha comenzado con una nueva iniciativa que tiene como objetivo fundamental mejorar el estándar de calidad de estas ferias costumbristas para transformarlas en un producto turístico regional que satisfaga las necesidades desde los puntos de vista sanitario, organizacional e identidad.
La iniciativa es financiada con recursos CORFO como un bien público para la competitividad regional, lo que conlleva un interés relevante de parte de las autoridades en hacer de este proyecto una acción concreta que prevalezca en el funcionamiento de las ferias y que fortalezca su condición de impulsoras de desarrollo regional.
En ese sentido, el director del proyecto, Dr. Rafael Tamayo, menciona que la idea de diseñar e implementar un modelo de gestión integrado que permita fortalecer y desarrollar de manera más eficaz y eficiente las ferias se asocia a la idea de que este tipo de actividades forman parte de la oferta turística de la región y, por tanto, constituyen un patrimonio local. “Estamos trabajando con todas las comunas de la región, Sernatur y la Mesa de Ferias Costumbristas, ya que la idea es trabajar con todas las instancias involucradas”, agrega.
Modelo de gestión innovador
El proyecto, que constituye una iniciativa única en el país, contempla tres etapas de desarrollo. En la primera se validará el modelo de gestión de mejora al alero de la Mesa Regional de Ferias Costumbristas, aplicando un plan piloto a una muestra de 9 ferias costumbristas (que actuarán como beneficiarias), pertenecientes a las comunas de Valdivia y Panguipulli y que presentan diferentes niveles de desarrollo. Al respecto, Guillermo Nova, profesional del Instituto de Turismo de la UACh y quien está coordinando los pilotos con las diferentes ferias, señala que durante el periodo estival se trabajó en terreno con cada feria y se pudieron comprobar fortalezas y debilidades de cada una, las cuales son claves al momento de elaborar el diseño.
En una siguiente etapa se contemplan capacitaciones en los diferentes ámbitos de gestión y específicamente la transferencia del modelo a las municipalidades, como también el traspaso de la administración del sitio web de difusión a SERNATUR. La idea, señala el director del proyecto, es que la instancia pública haga suyo el modelo de gestión y lo transforme en una guía, modelo unificador, en el que se enmarquen todas las ferias de la región para cumplir con los estándares de calidad requeridos.
En una última etapa se considera la sociabilización y presentación oficial del producto ferias costumbristas como parte de la oferta turística de la Región de Los Ríos. En esta etapa se validará el modelo de sustentabilidad del programa a través de la aplicación del modelo por parte de las municipalidades y SERNATUR. Así, se espera que cada uno de los 12 municipios de la región implemente la metodología a dos ferias locales, lo que implica que se trabaje con un total de 24 ferias que serán atendidas bajo la supervisión del equipo experto de la Universidad Austral de Chile.
En total, señala Mónica Sáez, estaremos trabajando con 33 ferias, lo que significa un 25% del total de ferias de la región y, por tanto, aproximadamente 730 locatarios.
Para Mónica Sáez, profesional que participará en la capacitación de los diferentes estamentos, el proyecto permitirá́ mejorar la propuesta de valor de las ferias costumbristas regionales a través de entrega del “Sello de distinción” a las mejores ferias, reconocimiento que las elevará a estatus de producto turístico regional. Este tema es muy relevante, indica, ya que las ferias que deseen alcanzar ese objetivo tendrán la oportunidad de acceder a los apoyos necesarios de parte de los municipios y otras entidades públicas como SERNATUR, FOSIS, INDAP y el Servicio de Salud.
Siendo las municipalidades el primer y directo apoyo que tienen las ferias, tendrán las herramientas para gestionar en conjunto con las otras instancias públicas, las mejores opciones para su financiamiento y desarrollo, de tal manera que puedan fortalecer sus opciones para alcanzar mejores niveles de calidad.
El equipo, explica el Dr. Tamayo, tiene la convicción de que, si se cuenta con el apoyo de los organismos pertinentes, el modelo implementado contribuirá́ a avanzar a la sustentabilidad de las ferias y en el desarrollo económico local, lo que abrirá las puertas a lo que todos queremos, que es aumentar la atracción de turistas a nuestra hermosa región, y ofrecerles productos de calidad en todos los ámbitos, sanitario, organizacional y de identidad local.