Una profunda, estremecedora e impactante presentación sobre la cruda realidad que vive hoy el pueblo filipino azotado por el tifón más violento que se tiene registro en la historia.
El Tifón HAIYA, como lo conoció la comunidad internacional o “Yolanda” como los filipinos le llaman, destruyó vastos territorios el pasado 08 de noviembre de 2013. Hoy tras cuatro meses de la catástrofe, el ex diplomático visita FACEA UACh, ilustrando el estado de las zonas afectadas por el tifón, destacando que pese a toda la devastación el espíritu y la cultura positiva y alegre, tan característica del pueblo filipino no se ha visto afectado.
“En ninguna de las zonas afectadas hubieron saqueos, por más crudas que fueron las primeras horas después de la catástrofe, el filipino apoyó y colaboró en todo momento. Es tal el nivel de respeto, que por más desesperación, terror y hambre que permaneciera en el ambiente, el pueblo filipino respetó fielmente las filas de espera para recibir la ayuda que llegaba. Sólo en un escaso período de tiempo, ante la escases de agua y la idea de morir inminentemente por falta de ella provocó pánico e inseguridad en la población, pero aun así, no afloró la violencia o la delincuencia como así sucede en situaciones similares en otros lugares del mundo…” señaló el Ex Embajador.
“Dentro de mi experiencia como Embajador en Filipinas, tuve la oportunidad de experimentar en carne propia el gran espíritu y calidad humana de todo el pueblo filipino, sin excepción: desde el multimillonario hasta el más pobre gozan de una humildad excepcional, alegría, positivismo y gran calidez humana que nos inspiró a impulsar algunas iniciativas para destacar y preservar este don” agregó el ex Diplomático.
El Dr. Roberto Mayorga fue enfático en dar ejemplos de nobleza, compañerismo y de la gran fortaleza que la gente de Filipinas expresa a través de una inquebrantable alegría, como un estilo de vida. Razones por las cuales el Dr. Mayorga se preocupó de generar instancias para ayudar a contener y a confortar a algunos sectores de la zona devastada que les fueron posibles materialmente abarcar.
“En Filipinas existe una radical diferencia entre clases sociales: de los 99, casi mil millones de habitantes, el 50 millones de ellos – aproximadamente- lo compone el sector más acomodado, con mayores ingresos. Luego, todos los demás están sumidos en la más absoluta y extrema pobreza. Tan dura, tan cruda y tan extrema, que ningún chileno ha llegado a conocer. Por eso, en la Embajada impulsamos dos actividades clave: El fútbol, deporte que no conocían hasta ahora, pues como colonia estadounidense sólo practicaban el básquetbol… Entonces invitamos a las Embajadas de Argentina y Brasil para hacernos cargo cada uno de un equipo y cada sábado nos reuníamos para jugar. Esperando que de ahí puedan surgir los nuevos talentos para este deporte de interés mundial. Hoy en día hay 15 embajadas participando y haciéndose cargo de un equipo cada una…” relataba el Ex Embajador.
“Por otra parte, quisimos inspirar a niños de un sector de extrema pobreza de la ciudad de Manila con la música. Gestionamos un piano y algunos otros instrumentos hace un año atrás e incentivamos a los niños a aprender, prometiendo que quienes lleguen a interpretar mejor el piano, tendría la posibilidad de viajar y conocer Chile. Luego de ello, tras el desarrollo de un concurso donde se midieron los avances de los niños, nos encontramos con la grata sorpresa de descubrir no a un nuevo talento en el piano, sino que a cuatro señoritas que son extremadamente talentosas. Por lo que tuvimos que gestionar rápidamente los recursos para premiarlas a todas para que puedan estar presentes hoy, junto a la Madre Divine Merci que les acompaña. Los cuales obtuvimos gracias al apoyo de la Universidad Austral de Chile” declaró el Dr. Roberto Mayorga.
“Todas estas actividades fueron implementadas en dos sectores rurales, más alejados de los apoyos internacionales y de la atención general, puntualmente nuestra capacidad de ayuda se abocó a cuatro escuelitas que fueron devastadas y como todos los demás, lo perdieron todo. Por lo que, gestionamos con Estados Unidos la adquisición de textos escolares, consiguiendo 4 mil textos escolares en inglés, los cuales no sólo sirvieron para apoyar a las escuelitas que estábamos atendiendo como Embajada de Chile, sino que para 18 escuelitas en total, lo cual nos tiene muy felices” agregó el ex Diplomático.
Luego de la exposición del Ex Embajador de Chile en Filipinas, Dr. en Derecho, Roberto Mayorga Lorca, presentó a otro miembro de la comitiva de dicho país que le acompañaba, el Sr. Medardo Márquez, quien ganara un concurso fotográfico organizado por la Embajada de Chile, con el fin de promover el espíritu de gran calidad humana del pueblo filipino, el cual se denominó: “Sonrisas para el Mundo”, quien retrató la tierna sonrisa de tres niños sin algunos de sus dientes. Obra que llamó: “Sonrisas del Corazón” y describió de la siguiente forma:
“Es verdad que estamos desnudos y sin dientes, pero poseemos una fortuna: nuestros espíritus continúan impertubables y nuestras sonrisas son puras. Somos hijos de la tierra Filipina. Nuestras sonrisas iluminan hasta los últimos rincones oscuros de nuestro país”.
Es así, como el Dr. Roberto Mayorga inicia la campaña Calidad Humana, la cual tiene por objetivo ayudar al pueblo filipino y a su vez, extender este espíritu a todos los países del mundo. Es por eso que el ex Diplomático decidió hacerse acompañar por esta delegación a la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Austral de Chile para hacer el lanzamiento oficial de esta campaña, invitando a todos a participar. Razón por la cual, el Coordinador del Programa SPRING, Dr. Felix Fuders se sumó a esta iniciativa y presentó a los asistentes un análisis, desde su perspectiva respecto de las potencialidades de sumar más apoyos para fortalecer esta iniciativa.
Al final de la jornada, los presentes tuvieron la posibilidad de apreciar el valioso talento de las jóvenes filipinas, quienes durante la mañana de este lunes 31 de marzo, realizaran una presentación a 500 alumnos del Colegio Inmaculada Concepción.