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Diversas coincidencias plantearon en un debate radial los Dres. Cristian Colther Marino (Instituto de Economía – Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas), Hernán Cuevas Valenzuela (Instituto de Historia y Ciencias Sociales – Facultad de Filosofía y Humanidades), Víctor Leyán Martínez (Instituto de Inmunología – Facultad de Medicina) y Gastón Vergara Díaz (Instituto de Estadística – Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas), quienes son los candidatos a la elección de dos Directores(as) Académicos(as) titulares y dos Directores(as) Académicos(as) suplentes, para el periodo 2021-2025, convocada por el Directorio de la Universidad Austral de Chile.
En el encuentro, realizado el martes 25 de mayo por Radio UACh y retransmitido por la nueva señal de cable 52 de Telefónica del Sur, la comunidad universitaria y regional pudo conocer las propuestas de los académicos que buscan ser parte del Directorio de la Universidad, organismo colegiado superior en materia de administración patrimonial de la Corporación, que representa a la Asamblea de Socios y participa en las decisiones corporativas de carácter permanente.
Las votaciones se efectuarán el lunes 31 de mayo desde las 9.00 hasta las 18.00 horas de manera no presencia, es decir, vía electrónica, y pueden sufragar las y los académicos de las tres primeras categorías (Profesor/a Auxiliar, Profesor/a Asociado/a y Profesor/a Titular). Para este proceso es importante que las y los académicos convocados a votar, mantengan activo su correo institucional para poder acceder al sistema de votación en línea, como también asegurarse de tener una adecuada conexión a internet.
Más vinculación entre academia y Directorio
El Dr. Cristian Colther planteó que “lo que falta es que el Directorio entienda que ésta es una Universidad y no una empresa. Soy Doctor en Economía así es que entiendo esto de los retornos, la VAN, la TIR y todos los indicadores que quieras. O hacer un proyecto de presupuesto o hacer la optimización que tú quieras respecto de todos los procesos de la Universidad y eso desde el punto de vista técnico lo entiendo, lo sé y lo podría aplicar. Pero lo que tengo claro también es que nuestra Universidad no es una empresa y, por lo tanto, más allá de las decisiones técnicas que se tienen que tomar, hay que tener presente que la motivación de los directores tiene que ir en torno a los principios”.
“Un primer principio es cuidar nuestra institución que es de todos y en donde deben caber todos. Por lo tanto, tenemos que estimular la heterogeneidad, la diversidad y las diferentes formas de pensar. Lo segundo es proteger su razón de ser porque la Universidad es para fuente de conocimiento científico y formación de excelencia. Es una Universidad, no un colegio ni una ONG. Las decisiones tienen que ir en esa dirección. Lo tercero que digo es que tiene que haber una administración ética y por el bien común para trascender a este presente que tenemos. Una Universidad es para 100, 200, 500 años más adelante. Nosotros vamos a formar parte de esta trascendencia, pero obviamente no puede depender de las personas, de las unidades que existen en nuestra institución. Tenemos que ver una mirada de muy largo plazo que lamentablemente las empresas no tienen. Yo creo que la gran deuda pendiente de los directores anteriores es entender que nuestra Universidad es una Universidad y no una empresa”, añadió el académico.
El Dr. Hernán Cuevas coincidió “en el sentido de la singularidad de la Universidad como institución y yo creo que eso es algo que no siempre es bien comprendido. A veces no es bien comprendido incluso en personas relativamente cercanas a nosotros, a la Universidad. Entonces desde ese punto de vista es un área permanente como aspirantes a representantes de los académicos es justamente sensibilizar permanentemente, no sólo a los miembros del Directorio, sino que incluso a los miembros de la Asamblea de Socios y a los socios en general de cuál es este rol. Nosotros no conocemos muchas veces tampoco quiénes son los miembros de la Asamblea de Socios, quiénes son estos socios y esa es una cuestión que yo creo es también relevante. Nos vamos a tener que enfrentar muy probablemente…, por lo menos eso es lo que he oído y he estado atento a lo que dicen las distintas candidaturas a la Rectoría de la Universidad y todos parecieran coincidir en que es necesario un proceso de revisión o reforma de los estatutos”.
Agregó que “éste va a ser un proceso en el cual vamos a tener que sensibilizar mucho al Directorio también para allanar el espacio diría yo y que de alguna forma en el estamento académico está más o menos claro eso. Pareciera que tal vez quizá entre los socios de la Corporación es visto con cierto recelo o distancia. Creo que no entienden completamente también a veces, ésta es una impresión que tienen, sobre cuál es el contexto en el que estamos, en un contexto de cambios globales, nacionales y también institucionales. Y hay que, en ese sentido, contribuir con la siguiente Rectoría, cualquiera que ésta sea, y ayudar en ese proceso”.
El Dr. Víctor Leyán coincidió en estos temas, pero hizo una reflexión en otro sentido. “¿Qué le falta al Directorio con relación a lo académico? El Directorio tiene contacto directo con la Rectoría, tiene representantes académicos, entonces uno podría pensar, bueno, si tiene esa interacción con la academia, ¿qué falta y por qué se ve tan distante? Yo creo que lo que falta aquí es un grado de interacción que pasa por ciertas normativas. La ausencia de estas normativas son los desvíos que se producen y que nos han llevado también a ser parte de esta crisis institucional que tenemos. Yo creo que es necesario promover estos cambios normativos para dar una mejor transparencia de lo que es el Directorio y acercarlo de esa manera a la comunidad académica”.
A su juicio, hay temas pendientes. “Yo creo que es muy importante revisar en el fondo la composición de los socios, establecer una normativa respecto a la elección de los directores que van a ser parte del directorio y que van a tener que interactuar con la academia. Normativas que tienen que ver con la resolución de conflictos; yo creo eso es importante, es un tema que hoy día la Ley de Educación Superior habla de ello y nosotros tenemos que empezar a trabajar en eso. Debería haber una política institucional respecto a eso. En temas de transparencia, yo creo que todo esto en su conjunto va a acercar la función del Directorio a la comunidad académica”.
El Dr. Gastón Vergara indicó que “el rol de la academia es que los socios tengan una participación un poquito más responsable sobre todo cuando hay elecciones. Si uno analiza el Directorio de socios todos tienen algún compromiso con la Universidad, o han sido exalumnos la mayoría, empresarios, y son 203. Pero cuando llega el proceso de votación sólo la mitad tiene derecho a votar. En la última elección fueron 108 los que votaron, ya sea por antigüedad y porque no tienen sus cuotas al día, entonces se va degradando la decisión. Además, cada socio puede votar por dos candidatos. De los 108, 101 estaban en condición de ser elegible por sistema estatutario de nuevo y finalmente en la elección participan 65. Lo peor todavía, la degradación de la toma de decisión, es que de esos 65 sólo 32 acuden en forma personal y 33 envían poderes. Creo que los socios de alguna forma deben ser motivados a esta elección y que tomen con un grado de seriedad de lo que va a ocurrir ahí. Porque si analizamos el Presidente saliente que fue forzado a salir del Directorio, él llevaba 15 años de antigüedad y de ellos 12 había ocupado este cargo. Entonces eso va generando, por supuesto, en cualquier organización o gobierno que dure tanto tiempo, toda esta corrupción y nepotismo”.
En su opinión, “la academia, a través de nosotros, de los directores que estemos presente ahí, debemos impulsar y ser exigentes con los socios y con este relato que he hecho de no degradar su participación de esa manera en una decisión tan importante. Por otro lado, quienes son elegidos también ser exigentes con el rectorado cuando propone cosas porque el mismo Presidente actual, don Francisco Luzzi, reconoce que sobre los covenants ellos no tenían idea y nunca vieron esos reportes, los cuales seguramente los vamos a discutir un rato más y aquí tenemos personas especialistas en economía, a pesar de que uno conoce lo que sucedió. Ese es mi compromiso a exigir esta participación más seria de parte de los socios”.
El cuerpo colegiado está integrado por doce miembros: ocho directores no académicos, que sean socios o socias de la UACh o representantes legales de personas jurídicas que lo sean; con una antigüedad como tales no inferior a seis meses a la fecha de la elección, y cuatro directores académicos que pertenezcan a cualquiera de las tres primeras categorías del escalafón académico, con un mínimo de dos años continuos de antigüedad a la fecha de la elección.
Según lo establecen los Estatutos de la UACh, en virtud de su función primordial, le compete cautelar los intereses financieros de la Corporación, contribuir a mantener e incrementar el patrimonio y promover la captación de recursos, así como contribuir a promover su desarrollo y a mantener su vinculación con la comunidad local, regional y nacional.