Como Decanatura, en representación de nuestra comunidad y diversos estamentos de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad Austral de Chile, queremos manifestar, en primer lugar, nuestra absoluta condena a los hechos recientemente acontecidos en la comunidad de Temucuicui, en donde resultó muerto el joven Camilo Catrillanca. Su muerte constituye un crimen perpetrado por agentes policiales del estado chileno, cuestión que revela el despliegue de una flagrante política de represión en contra del pueblo mapuche. Esta violencia, que nos recuerda los peores momentos de nuestra historia reciente, tiene una dimensión grave, pues emana de un conjunto de acciones deliberadas y planificadas a la sombra de un programa de militarización y hostigamiento –expresado en el denominado “Comando Jungla” – cuyo propósito no es otro que acallar y reprimir las legítimas demandas del pueblo mapuche; ciertamente sustentadas en una historia de despojo territorial y de obliteración cultural, en donde el estado chileno ha sido su principal artífice.
En segundo lugar, manifestamos nuestra más profunda solidaridad con la familia de Camilo Catrillanca. Su pérdida irreparable tiene, sin embargo, el simbolismo de honrar a su pueblo en su lucha histórica por la autonomía y la autodeterminación. También expresamos nuestra solidaridad con la comunidad de Temucuicui y con el pueblo mapuche en su amplísima extensión territorial en el sur de Chile.
Por último, nos sumamos a las distintas voces ciudadanas que reclaman justicia y condena a los asesinos de Camilo, en particular solidarizamos con las y los estudiantes mapuche que se han movilizado para interpelar a la comunidad universitaria y Valdiviana. Es hondamente contradictorio impulsar un supuesto plan de desarrollo para las comunidades indígenas en la Araucanía, y simultáneamente vigilar y reprimirlas con armamento de guerra y comandos de asalto entrenados para matar. En este marco, es urgente que el Gobierno del presidente Piñera asuma su responsabilidad política en este triste acontecimiento y corrija urgentemente el diseño de su contradictoria política hacia el pueblo mapuche.
Consideramos urgente el término de la violencia en la Araucanía y de toda acción que atente contra los Derechos Humanos, en particular hacemos un llamado a los organismos competentes en resguardar los Derechos de la Infancia en las comunidades mapuche, que han sido las principales víctimas de la violencia policial.
Equipo Decanatura
Facultad de Filosofía y Humanidades
Universidad Austral de Chile