<p align="justify">Con motivo del centenario del natalicio del ex Presidente Salvador Allende, el centro cultural que lleva su nombre realizó este miércoles 5 de noviembre el lanzamiento del libro <strong>"Allende. El hombre y el político. Memorias de un secretario privado"</strong>. El evento, que contó con la presencia de su autor <strong>Ozren Agnic</strong>, tuvo lugar en el auditorio del edificio CIDFIL de la <strong><a href="http://www.uach.cl">Universidad Austral de Chile</a></strong>, donde llegó una treintena de personas entre estudiantes y académicos.</p><p align="justify">Ozren Agnic, de profesión ingeniero comercial, fue secretario privado del Presidente Allende al comienzo de su mandato con sólo 22 años. Posteriormente fue presidente ejecutivo del primer banco estatizado en Chile, el Banco Concepción. Ésta -dijo- "fue una labor sumamente importante para el gobierno de la Unidad Popular, ya que de ello dependía si el gobierno tenía dinero o no para realizar sus programas sociales".</p><p align="justify">La presentación del libro estuvo a cargo del Prodecano de la Facultad de Filosofía y Humanidades, Dr. Yanko González, quien tuvo palabras de elogio a la forma cercana y ágil como el autor une su experiencia personal con los hechos históricos, creando página a página una nueva "historia".</p><p align="justify">Agnic por su parte agradeció el gesto de la Universidad Austral de Chile, a través de su Facultad de Filosofía y Humanidades, de recibirlo y poder compartir con la gente "su verdad", ya que según dijo "se ha mentido y distorsionado mucho la figura de Salvador Allende". Por esta razón, con este libro se ha abocado a la tarea de desmitificar "al Allende que pintó la dictadura para justificarse".</p><p align="justify">Respecto de la figura del mandatario contó una serie de anécdotas que revelan su profunda convicción democrática, como cuando Ibáñez del Campo le ofreció el poder a cambio de que lo apoyara en un golpe de Estado a Alessandri, al cual se negó rotundamente o cuando El Mercurio lo difamó sin miramientos, a lo que Allende replicaba "es el juego de la democracia", cuando todos lo instaban a intervenirlo.</p><p align="justify">Finalmente Agnic instó a los presentes a ser portavoces de la verdad de Allende y a contribuir en recuperar su memoria.</p>