Un descubrimiento de alto valor científico fue dado a conocer alrededor del mundo luego que un estudiante de Doctorado de la Universidad Austral de Chile publicara información sobre un sitio ubicado en los fiordos de Chiloé donde acuden en gran número ballenas azules para cuidar y alimentar a sus ballenatos, constituyendo el criadero de esta especie más importante descubierto en el hemisferio sur. El hallazgo ayudará a los investigadores a entender el comportamiento de estos escasos animales y a tomar medidas para protegerlos.
Rodrigo Hucke-Gaete, alumno tesista del Instituto de Ecología y Evolución de la UACh, informó a la BBC de Londres "»es increíble dar con algo como esto en el 2003. Uno piensa que ésta no es una era de descubrimientos, pero todavía tenemos mucho que aprender"», al referirse a este hallazgo que desafía las teorías que hasta ahora existen sobre la migración estacional de las ballenas.
El descubrimiento parece contradecir las teorías tradicionales sobre la migración de estos mamíferos. Supuestamente, en el hemisferio sur las ballenas azules se alejan de las aguas antárticas al comienzo del otoño austral. Llegan al trópico a inicios del verano para parir y alimentar a sus crías. Cuando llega la primavera, comienza su viaje de vuelta al sur.
La ballena azul es el mamífero de mayor tamaño de la Tierra y ha estado bajo amenaza de extinción durante muchos años debido a la caza comercial que se ejerció sobre ella hasta 1960.
Los detalles del hallazgo se publicaron en el periódico científico Biology Letters y en él se establece que los mamíferos se encuentran en el Golfo Corcovado, cerca también de la boca del Huafo, al sur oeste de Chiloé.