El pasado 25 de noviembre, la Red de Atención de Psicológica de Universidades CRUCH organizó un conversatorio que tuvo como finalidad conmemorar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer. A la jornada asistieron profesionales del área de la salud mental y estudios de género, estudiantes, docentes y público en general, quienes desde sus propias experiencias aportaron a la discusión.
El conversatorio comenzó con la proyección de un extracto de una conferencia de Rita Sagato, en donde manifiesta que “las sociedades son transicionales, es decir, en un permanente transito a una modernidad que nunca alcanzamos. Lo anterior nos transforma en sociedades violentas, donde el hombre es la verdadera víctima del frente al que debe llegar. Es por tal motivo que los hombres se ven envueltos en una inseguridad mediante la cual reconstruyen su virilidad frente a los otros a través de la violencia”.
Posteriormente, Alejandra Zolezzi, Directora de la Clínica de Atención Psicológica de la UACh, inició la conversación con la pregunta: ¿cómo cambiamos frente a violencias patriarcales tan instauradas? Luego expresó que “Segato habla de conciencia y civilización, pero siempre hacia desmontar un sistema tan perverso como el patriarcado, comenzando por desmontar el mandato de la masculinidad. Las mujeres debemos tener conciencia de género, los hombres deben trabajar para comprender su fragilidad y cómo esta los lleva a la violencia”.
Por su parte, Luisa Castaldi, Directora de la Clínica Psicológica de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, abordó la importancia de vincular lo expuesto Segato con la labor de los CAPs argumentando que “las personas que llegan a terapia parecieran que tuvieran un modelo hacia donde ir y ese modelo está conformado sobre la base de ciertas creencias que se van construyendo en términos sociales. En términos de género, la deconstrucción es un camino que nos obliga a revisar esta premisa”.
Después, Nelson Muñoz, integrante del Centro de Atención Psicológica y Salud Integral (CAPSI) de la Universidad de Talca, comentó que “como sujeto masculino, tomas conciencia de nuestra fragilidad es un punto complejo, pero a la vez esperanzador. Lo anterior implica un tránsito reflexivo profundo que de alguna medida nos va a llevar a la acción”.
Luego los asistentes compartieron sus opiniones sobre lo manifestado por los expositores, siendo uno de los puntos las relevantes la necesidad de que la lucha en contra de los estereotipos no recaiga solo en las mujeres, sino que en toda la sociedad. Lo anterior se debe a que por lo general a las mujeres se les cría desde el cuidado hacia la violencia a través del miedo. En consecuencia, siempre son ellas que en un espacio terapéutico se hacen cargo de trabajar violencia, muy contrario al caso de los hombres, donde dicho fenómeno no sucede.
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