El centro de la vida social y cultural de las ciudades son los espacios públicos que entregan carácter e identificación a cada área de la urbanización, es así como las áreas verdes pasan a ser elementos de integración y homogeneidad social al interior de estos espacios.
Así nace la necesidad de mejorar la calidad de vida de las poblaciones, a través del tratamiento de sus entornos, rescatando el valor tradicional de la ciudad y su gente, lo que implica resaltar los valores estéticos del paisaje preexistente por ejemplo en la región de Los Lagos. Todo esto potencia la conservación del espacio natural e incorpora el diseño paisajístico a la infraestructura de la ciudad.
Un plan general de paisajismo puede caracterizar cada sector de la Urbe de acuerdo con las actividades a desarrollar, dependiendo de su ubicación, superficie y relación con los otros espacios públicos. Incorporando un sistema de áreas verdes interconectado a través de circuitos peatonales que contemple diferentes tipos de espacios públicos como: Parques Naturales; Parques Urbanos; Plazas Temáticas; entro otros, que responda a la visión de ciudad universitaria que instancias como la Corporación Puerto Montt Superior y sus integrantes buscan entregar a la ciudadanía.
Como criterio principal el borde costero debería conformar un circuito de espacios públicos peatonales y áreas verdes que permitan recorrer la costanera con una lectura fácil de reconocer y que identifique a los habitantes con su ciudad, a través de una lógica visual, continuidad espacial e Identidad cultural.
La incorporación de hitos que relacionen la imagen actual con la imagen histórica de la Ciudad, para resaltar su carácter e identidad, representados a través de elemento gráficos, escultóricos, etc. La generación de aperturas visuales al paisaje colindante que ordenen las diferentes vistas en segundo y tercer plano a las islas, cerros y volcanes cercanos propios de la zona. El complementar circuitos inclusivos para peatones y ciclistas, estableciendo franjas de pavimentos duros continuos en todo el borde costero, con buena iluminación en las circulaciones principales. La implementación con inmobiliario urbano que permitan generar zonas armónicas de permanencia que sirven de resguardo y protección de las condiciones climáticas. La utilización de vegetación representativa, que permita establecer una continuad, prefiriendo el uso de la diversidad de especies nativas existente. La integración al turista en el diseño de la ciudad haciéndola amigable para el visitante, incorporando circuitos con información relevante.
Son solo algunas de las propuestas que se podrían generar y reactivar desde la Corporación Puerto Montt Superior, como entidad aglutinadora de instituciones de Educación Superior y como parte de un plan de acción para la rehabilitación del Borde Costero de la Bahía de Puerto Montt.
*Ver columna publicada en diario El Llanquihue.