En el Fundo Arquilhue se reunieron distintas instituciones relacionadas con el ámbito forestal, con el fin de analizar en terreno el manejo integral del bosque nativo, abordando los temas de silvicultura, aserrío, nuevas tecnologías, costos y comercialización.
La actividad, llevada a cabo el 27 de septiembre de 2018, fue iniciativa de la Asociación Gremial Aprobosque junto a Pymemad, Pronitens, el Colegio de Ingeniero Forestales y Aserraderos MEBOR.
El Presidente de Aprobosque, Jan Köster, comentó que el objetivo principal fue observar el proceso de aserrío como agregación de valor a la madera nativa. “Es una tecnología que si bien no es nueva, estamos introduciéndola al aserrío por ser de mayor precisión. En el fondo, nos ayuda a conservar el valor de los bosques, ya que en los aserraderos tradicionales muchas veces la madera se estropea por cortes imprecisos, lo que no le permite al propietario recuperar su dinero para seguir invirtiendo en el bosque”, explicó.
La salida contempló la visita a distintas estaciones en un bosque manejado en forma sustentable. Luego se observó la tecnología del aserrío, la cual fue presentada por representantes de la marca Mebor.
Vinculación con la academia
Tanto para la Facultad de Ciencias Forestales y Recursos Naturales de la UACh como para Aprobosque, la mantención de este vínculo es relevante. Por ello, fueron invitados a esta actividad estudiantes de esta casa de estudios, acompañados por la Directora de Escuela (I), Dra. Alicia Ortega.
Heidi Bottcher, estudiante del plan común Ingeniería en Conservación de Recursos Naturales-Ingeniería Forestal, explicó que decidió participar para tener una visión más integral de este tema y conocer distintas opiniones. «Me gustó escuchar la discusión sobre cómo hacer manejo de bosque nativo, que es algo que me interesa mucho”, explicó.
En tanto, Daniel Acevedo, de quinto año de Ingeniería en Conservación de Recursos Naturales, manifestó que el área de la silvicultura es algo a lo que gustaría dedicarse a futuro y que esta fue una buena oportunidad de aprender técnicas que se utilizan en la realidad laboral. “Es la única forma que tenemos de acercarnos a estas instancias y generar los nexos con Aprobosque”, señaló.
Para Jan Köster, contar con la participación de la UACh “fue muy bueno, porque uno puede aprender mucho en los libros pero para ejecutar tienes que haber estado en terreno, en el bosque, y entender los procesos”.