En el marco de las estrategias de refuerzo al trabajo de intervención psicosocial desarrollado por el equipo Abriendo Caminos iniciativa enfocada a hijos de personas privadas de libertad dependiente de la Escuela de Psicología de la Universidad Austral de Chile Sede Puerto Montt, hace nueve meses se sumó al equipo la psicopedagoga Gabriela Ulloa Figueroa, que desarrolla acciones para instalar estrategias de aprendizaje que permitan a niños, niñas y adolescentes en edad escolar, obtener un adecuado desempeño académico.
La profesional está a cargo de generar instancias de intervención psicopedagógica y sistematizada, para todos aquellos estudiantes beneficiarios del programa, que así lo requieran.
Indicó respecto al trabajo que “es profesional y humanamente enriquecedor”. Su labor está asociada directamente con las duplas psicosociales, apoyo que ha significado para éstas, contar con otra mirada en intervención, “los profesionales que ejecutan el programa, son encargados detectar y pesquisar los casos y derivación. Para las evaluaciones diagnósticas se citan en el Centro de Salud La Colina UACh para 2 o 3 sesiones que se aplican con los niños y adolescentes”.
Después de la evaluación diagnóstica los estudiantes que requieren, se derivan a la red social, neurólogo, psiquiatra, psicólogos, fonoaudiólogos, medicina general, etc. En Colina UACh existe un gran aporte a este programa con atención prioritaria.
Las situaciones más recurrentes y que están dentro de los porcentajes normales de la población escolar chilena, son problemas de aprendizaje, rendimiento y riesgos de repitencia, dificultades de conducta y adaptación escolar, niños con compromiso cognitivo o discapacidad intelectual, trastornos del desarrollo, dificultad del lenguaje expresivo y comprensivo, entre otros. Las causas de ello son múltiples, ya sea de carácter orgánico, ambientales, mixtas, deprivación sociocultural, falta de estimulación, etc.
El trabajo se realiza a través de visita semanal 10 o 12 casos promedio 1 o 2 intervenciones semanales mínimo de 1 hora en la casa, es un proceso con la familia, donde la mayoría de los casos cuentan con resultados positivos, como por ejemplo incremento del compromiso y motivación escolar, técnicas y hábitos de estudio, integración de la familia al proceso escolar (la mayoría abuelitas), estimulación temprana de habilidades cognitivas y sociales.
“La respuesta de las familias es de valoración a un apoyo de este tipo, es una atención personalizada, en casa, en su entorno. Se nota un impacto dentro de la dinámica familiar, al otorgar importancia al tema escolar. Se incorpora a la familia en el seguimiento y estrategias de orientación psicoeducativa con los papás, se generan hábitos y apoyo a niños en el proceso de aprendizaje” destacó la psicopedagoga.
“Agradezco la oportunidad de poder aportar con mi trabajo a las familias, recibo una enorme compensación de afecto por parte de ellas, el hecho de ser atendidos de manera profesional y personalizada es un hecho que retribuyen constantemente.”